Los trabalenguas son juegos de palabras formados por versos, oraciones o textos cortos, que al combinar fonemas y sonidos similares hay más probabilidad de equivocación en la pronunciación oral. También pueden inducir al error a la hora de escribirlos. Por eso, pueden ser un recurso interesante para trabajar la lectoescritura.
La lectoescritura es un proceso que puede marcar el correcto desarrollo del niño en el futuro. No solo como personas, sino también como trabajadores. Disponemos de muchos recursos y maneras de fomentarla, pero en esta etapa de Primaria buscamos maneras que sean más originales para que los niños y niñas mantengan la curiosidad de aprender. ¡Y qué mejor que perfeccionar el lenguaje y desarrollar la mente que con los trabalenguas!
Estos juegos de palabras suponen una manera original de practicar la lectoescritura ya que los pequeños ejercitan su memoria, su rapidez y una mayor ampliación de la gramática y el lenguaje. Así mismo, también practican la dicción y la lectura en voz alta.
A continuación, os explicamos algunos de los beneficios que se obtienen con la práctica de los trabalenguas:
- Mayor interés y mejora en la lectura: Para que los niños lleven a cabo un buen proceso enseñanza-aprendizaje, hay que desarrollar buenos hábitos lectores desde que son pequeños. Y si recurrimos a los trabalenguas, obtendremos un recurso divertido para crear interés en la lectura y también en el lenguaje. Además, les obligará a concentrarse en lo que leen para no caer en la trampa del trabalenguas. De este modo se fijarán más, sin que se den cuenta, en cómo se escriben y pronuncian las palabras.
- Ampliar el lenguaje: Los trabalenguas son un buen ejercicio de aprendizaje para aumentar el léxico de los niños, porque es una herramienta que permite que estos practiquen y a medida que ejercitan van integrando nuevo vocabulario.
- Comprensión lectora: Los niños tendrán que entender las frases, a menudo rocambolescas, y hacer un esfuerzo en comprender el significado de las oraciones que están leyendo, porque la comprensión lectora es la base del aprendizaje.
- Desarrollo de la expresión oral: La originalidad del ejercicio se basa en que los niños puedan ‘tropezar’ con el trabalenguas y como consecuencia, aumenten sus ganas de superación por exponer correctamente el ejercicio. También es un reto para poder pronunciar correctamente y sin errores el trabalenguas. Puede convertirse en un juego para todos los alumnos para ver quién es el primero en decirlo bien. En este sentido, como los niños se esfuerzan más, se desarrollan sus destrezas comunicativas en base a la expresión oral.
Disponemos de infinidad de trabalenguas. Desde los más cortos a los más largos, más fáciles o más difíciles. Trabalenguas que combinan aliteraciones, homónimos, cambios de letras, cacofonías, etc. Es una manera muy diferente y rica de practicar la lengua. ¡Y para darle más dificultad al ejercicio podemos hacer que entre los niños/as inventen sus propios trabalenguas y los escriban!