STABILO Aula – Lectoescritura y coloreado para profesores de infantil y primaria

Trabaja la lectoescritura a través de onomatopeyas de animales

En la educación Infantil, la adquisición de habilidades de lectoescritura es un paso crucial. Por eso, la incorporación de elementos lúdicos y creativos puede facilitar la forma en la que los niños aprenden a leer y escribir. Te proponemos una tipología de ejercicios divertidos y diferentes, que a la vez enseñará a los pequeños el concepto de las onomatopeyas, y las propias de los animales.

Como refleja el artículo de Viviana Paola Cordonez-Fonseca y Zila Isabel Esteves-Fajardo: “La onomatopeya en el desarrollo de la conciencia fonológica”, publicado en la revista Cienciamatria, 9 (1), 508-521, en la Edición Especial 2023, el uso de estos sonidos puede facilitar la capacidad de los alumnos.

Las onomatopeyas son palabras que imitan o simulan el sonido que describen. En el contexto educativo, estos fonemas se suelen relacionar con los sonidos de animales y pueden ser herramientas pedagógicas efectivas. Aquí exploraremos cómo estas palabras pueden mejorar la lectoescritura de los niños en esta etapa tan crucial de su desarrollo.

Una de las principales ventajas de utilizar onomatopeyas en la educación infantil es su capacidad para capturar la atención de los niños. Los sonidos como «miau», «guau», «mu», «pío pío», entre otros, son fácilmente reconocibles, lo que hace que la lectoescritura sea más atractiva y divertida para ellos.

Además, estimulan la audición y la pronunciación. Al emitir estos sonidos, los niños están desarrollando activamente sus habilidades auditivas y de pronunciación. Esto contribuye a crear una base sólida para la comprensión oral y la pronunciación correcta de las palabras escritas.

Otra ventaja importante es la asociación visual y auditiva que las onomatopeyas ofrecen. Cuando los niños ven la palabra «miau», por ejemplo, pueden asociarla con el sonido que hace un gato. Esto refuerza su comprensión de que las letras y las palabras tienen significados y representan elementos del mundo real, algo que resulta beneficioso para el desarrollo de la lectoescritura.

Los profesores/as pueden implementar el uso de onomatopeyas de diversas maneras en el aula:

  • Pueden introducir cuentos o libros que incluyan onomatopeyas y animales, lo que es una excelente manera de involucrar a los niños en la lectura.
  • Plantear adivinanzas donde los niños tienen que identificar el animal a partir de su sonido («¿Quién hace ‘guau-guau’?») fomentan la participación activa y el aprendizaje.
  • Invitar a los niños a crear sus propias historias utilizando onomatopeyas y sonidos de animales les permite explorar la escritura de manera creativa y libre.

El uso de onomatopeyas, especialmente aquellas relacionadas con los sonidos de animales, puede desempeñar un papel significativo en la mejora de la lectoescritura en la educación Infantil. Como hemos visto, estimulan la imaginación, fortalecen las habilidades auditivas y de pronunciación, además de ayudar a los niños a comprender la relación entre el lenguaje escrito y el mundo que los rodea.